Y para ello, emplearé todos los recursos que considere necesarios para que amplíes tu campo de visión y de acción y asumas, que el poder de cambiar las cosas o aceptarlas está, solamente, en tus manos.
Te haré preguntas, las llamadas “preguntas poderosas”, te retaré – si se diera el caso – y te pondré a prueba con dinámicas que te sorprenderán.
Como coach, jamás te diré lo que tienes que hacer (si es eso lo que buscas, el coaching no es para ti), pero permanecerá a tu lado hasta que lo descubras por ti misma y puedas caminar sola.